Cómo ciclar un acuario correctamente

Así que, ¿quieres iniciar el ciclado de tu nuevo acuario? Esta es, sin duda, la tarea menos
agradable de los aficionados a este hobby. Este paso genera más dudas, confusión y
frustración que cualquier otro, y lleva a muchos principiantes a rendirse.
En Jufor Mundo Animal entendemos el ciclado del acuario de una manera diferente. De
hecho, nosotros creemos que puede ser entretenido. ¿Por qué? Porque es más simple de lo
que muchos quieren hacernos creer. El ciclado, ya sea largo o instantáneo, es un proceso
sistemático de reglas y parámetros a seguir a la hora de ciclar cualquier acuario. Así pues,
¿En qué consiste el ciclado de un acuario?
Ciclado
El término 'ciclado' se refiere al establecimiento de la filtración biológica del acuario. La
filtración biológica, o 'biofiltro', se compone de bacterias que filtran el amoniaco (tóxico) a
través de un proceso denominado 'nitrificación'. La nitrificación involucra a dos tipos de
bacterias y consiste en la transformación del amoniaco en nitratos. Una bacteria actúa como
transformadora del amoníaco en nitritos. La segunda termina el proceso transformando los
nitritos en nitratos. Mediante este artículo queremos animarte a dejar de pensar en las
bacterias en términos de 'microbios' y empezar a considerarlas como 'fauna'. No hace falta
tener un doctorado en microbiología para comprender y aplicar los conocimientos acerca de
las bacterias nitrificantes en beneficio de nuestros peces. Así pues, nos referiremos a ellas
como parte del ecosistema del acuario porque, al fin y al cabo, eso es lo que son. Requieren de
un ambiente y condiciones específicos, como cualquier otro ser vivo.
¿Dónde consigo las bacterias nitrificantes?
Las bacterias nitrificantes no aparecen por arte de magia en el acuario, aunque en ocasiones
se habla del ciclado del acuario en términos que hacen creer que así sea. Como los demás
elementos de un acuario, han de ser 'importadas' de cualquier otro sitio, aunque sea sólo un
'puñado' de ellas. Pueden provenir de materiales u objetos que estuvieron antes en otro
acuario, aunque a menudo vienen con los propios peces si no se usa otro tipo de materiales.
Así pues, a la hora de poner en marcha este cultivo sólo hace falta una cosa: un conversor del
amoniaco en nitratos. Y, como cualquier otro elemento que acabe en el acuario, hay que
añadirlo.
Imaginemos que iniciamos el ciclado de un acuario con la introducción de un sólo pez, y que
este pez es 'portador' de una bacteria de cada tipo de las necesarias para el ciclado biológico
del acuario.
Comenzando con una población de 2 bacterias y dado que estas bacterias se dividen una vez
cada 24 horas, al cabo de 40 días y en unas condiciones ideales, tendríamos una población de
549.755.813.888 bacterias. Con una floreciente colonia como ésta, los niveles de amoníaco y
nitritos serían prácticamente de 0ppm, los nitratos estarían presentes y el acuario estaría
ciclado.

Una manera más rápida (y no por ello menos efectiva) de ciclar el acuario, es introducir
directamente las bacterias nitrificantes mediante la utilización de un producto como
FRITZZYME de FRITZ AQUATICS.

Aunque la introducción de material proveniente de otro
sistema previamente ciclado puede establecer la biofiltración, FRITZZYME funciona igual de
bien, e incluso mejor, porque sabemos que, con cada botella, estamos aportando la cantidad
necesaria de bacterias. Así mismo, descartamos el riesgo de introducir virus peligrosos o
cualquier otro elemento patógeno que se encontrara presente en el sistema del que hemos
importado el material.
El acuario de Nerea se ha ciclado, pero el de Lucas no. ¿Por qué?
La respuesta es sencilla: las condiciones del agua. Antes de iniciar el ciclado de un acuario es
importante disponer de ciertos conocimientos sobre las condiciones necesarias para que las
bacterias nitrificantes sobrevivan. Piensa en tu acuario como una 'central eléctrica' y en cada
parámetro del agua como en un interruptor. A medida que se consigue cada una de las
condiciones necesarias, pulsas el interruptor y una luz verde se enciende. Cuando todas las
luces verdes están encendidas, las condiciones son idóneas para que las bacterias sobrevivan.
Una única luz roja y la frustración continuará. Así pues,
¿Cuáles son esos parámetros?
El Agua
La central eléctrica de la nitrificación
El Oxígeno
Las bacterias nitrificantes son microbios aérobicos acuáticos. Esto significa que necesitan
oxígeno para funcionar adecuadamente, aunque no necesariamente para vivir
(profundizaremos en esta idea más adelante). Por tanto, un sistema aireado adecuadamente
con la cantidad apropiada de oxígeno es necesario para el ciclado del acuario. Cuanto menos
oxígeno tengan, más aletargadas estarán las bacterias y menos se alimentarán, lo que derivará
en una menor cantidad de amoníaco y nitritos eliminados del sistema. Cuanto más oxígeno,
mejor. Si tu acuario está adecuadamente 'oxigenado', ya tienes tu primera luz verde.
La Temperatura
La temperatura es muy importante para las bacterias nitrificantes, ya que las variaciones en la
temperatura pueden afectar a su supervivencia. Las bacterias nitrificantes pueden vivir entre
los 0 y los 44 grados centígrados. Fuera de este rango de temperatura, mueren. Esto significa
que las bacterias nitrificantes no pueden ser congeladas. También elimina la posibilidad de
comercializarlas en forma de polvo o esporas. La temperatura óptima para las bacterias
nitrificantes en un tanque o acuario está entre los 23 y los 30 grados centígrados. Por debajo
de los 23 grados su metabolismo se ralentiza, y su capacidad de conversión del amoníaco se
divide por la mitad por debajo de los 18 grados. Si la temperatura de tu acuario se encuentra
dentro del rango óptimo, entonces tienes tu segunda luz verde.

El pH
El pH también es fundamental para las bacterias nitrificantes. En la mayoría de sistemas de
agua dulce se recomienda mantener el pH entre 7.4 y 8.0; y entre 8.0-8.3 en la mayoría de
sistemas de agua salada. Un pH fuera de estos rangos estresará a las bacterias nitrificantes y,
en la mayoría de los casos, disminuirá su reproducción. Enciende este interruptor y tendrás
otra luz verde.
La Alcalinidad
La alcalinidad es el factor que hace fracasar con más frecuencia a la hora de iniciar un acuario.
Raramente se analiza en este contexto y es la causa de muchas frustraciones. La alcalinidad no
suele ser un problema en los acuarios de agua salada, dado que la sal que se añade al agua
contiene la mayoría de los requisitos que necesitan las bacterias nitrificantes. La alcalinidad es,
de lejos, mucho más problemática en los acuarios de agua dulce. El agua del grifo es más
recomendable que la sometida a procesos de ósmosis inversa, ya que éstos eliminan las trazas
de elementos necesarios y fosfatos. Aunque, evidentemente, depende del área en que vivas.
La dureza total de carbonatos del agua (KH) no debería ser inferior a 70 KH (7 dKH) y sus
niveles óptimos oscilan entre 90-120 KH (9-12 dKH). Este parámetro debería ser verificado
antes de intentar ciclar un acuario.
Los Fosfatos
¿Fosfato? ¿Qué es eso? El fosfato es uno de los ladrillos fundamentales de la vida en la Tierra.
Por tanto, si las bacterias nitrificantes se ven privadas de fosfatos, no funcionarán. Este
problema suele presentarse cuando se utiliza agua sometida a ósmosis inversa o agua
destilada en lugar de agua del grifo. El agua que ha sido intensamente filtrada carecerá, no
sólo de fosfatos, sino de trazas de otros elementos necesarios, como bicarbonato de calcio,
magnesio y sodio. En muy raros casos, el agua del grifo puede carecer también de estos
componentes (dependiendo de la zona en la que vivamos).
Aunque, de nuevo, esto ocurre muy raramente, es importante comprobar los niveles de
alcalinidad y de fosfatos del agua si vives en una de esas zonas. En definitiva, en los sistemas
de agua dulce, es recomendable utilizar agua del grifo. En caso de que se utilice agua filtrada o
sometida a ósmosis inversa, es recomendable suplementarla con ciertos elementos y con una fuente de ácido fosfórico.

Pues bien, si se dan todas estas condiciones, necesarias para la supervivencia de las bacterias
nitrificantes, ya sólo bastará con introducir un elemento productor de amoníaco (peces) para
que las bacterias nitrificantes puedan vivir, reproducirse y tú puedas disfrutar de un acuario
saludable durante años.